Datos entre el 2016 y el 2020 indican que 10% de latinoamericanos se consideran flexitarianos (promueven la ingesta de una gran cantidad de alimentos de origen vegetal y también de algunos de origen animal, pero en menor medida), 350% de incremento de vegetarianos en el mundo y que el 36% de consumidores a nivel mundial están sustituyendo el consumo de proteína animal por proteínas alternativas.
Estos fueron proporcionados por la docente e investigadora del Centro Nacional de Ciencia y Tecnología de Alimentos (CITA) de la Universidad de Costa Rica Ileana Bermúdez en su exposición “El auge de las proteínas alternativas” durante el Summit Ingredients 2022 de CACIA.
Ello es un reflejo de que el mundo está cambiando, donde Costa Rica no es la excepción.
“El consumo de proteínas alternativas no se trata de una moda. En Costa Rica, su crecimiento anual es del 36%, creando una nueva cadena de valor en materias primas, productos terminados y procesos innovadores”, expuso Bermúdez, quien contó que en el CITA, por ejemplo, han apoyado a emprendedores para producir y exportar polvo de grillo.
Este cambio es motivado a nivel mundial por la sostenibilidad, el bienestar animal y la alimentación saludable y ha generado la búsqueda de sustitutos sostenibles para la proteína animal.
Entre esas proteínas alternativas, la experta mencionó cuatro: proteínas vegetales, insectos comestibles, proteínas de microorganismos y carne cultivada, donde sus requisitos son: tecnofuncionabilidad, precio accesible, calidad nutricional, producción sostenible, nuevas fuentes y características sensoriales.
“Algunas de las promesas de las proteínas alternativas: son buenas para los animales y planeta, mejor para el cuerpo, sabor tradicional y alimentan al mundo ahora y en el futuro”, dijo Bermúdez, destacando que el gran reto es que el consumidor no perciba una diferencia en el sabor.
Con respecto a los insectos, la expositora destacó que en el 2013 la Organización para la Alimentación y la Agricultura (FAO) propone a los insectos como fuente de proteína sostenible.
“Su buena calidad nutricional, la producción sostenible y el bajo riesgo de transmisión de zoonosis son algunos de los beneficios de los insectos en la alimentación”, enunció Bermúdez.
Durante nuestra Summit Ingredients 2022, la experta en tendencias sobre proteínas alternativas y miembro activo en los procesos de investigación e innovación, impartió una conferencia bastante ilustrativa sobre los nuevos desarrollos y oportunidades de crecimiento industrial en un tema que puede convertirse en un compomente importante de la alimentación del futuro, a partir de una industria alimentaria, donde la ciencia y la investigación son los que marcan la pauta. Le invitamos a ver la ponencia completa…